La rosa y la daga

En una tierra desértica, cada nuevo amanecer cubre los secretos que se ocultan entre las dunas. Día tras día, una joven protege los suyos a costa de la lealtad de quienes confiaban en ella.
No muy lejos de allí, un rey reconstruye lo irreparable y un chico recurre a la magia para desentrañar el enigma de un viejo castigo.
Pero hay verdades que es arriesgado desvelar.

Después de haber leído La ira y el amanecer, no podíamos quedarnos sin leer su continuación, y en cuanto hemos tenido tiempo para ella, la hemos leído.

Aunque esta segunda parte comienza con un ritmo un poco lento, en seguida coge velocidad haciendo que no seamos capaces de parar de leer, de manera que leemos un libro de casi 500 páginas en muy poco tiempo.

Como la mayoría sabéis, esta historia es un retelling de Las mil y una noches y, aunque a nosotros los retellings no nos convencen demasiado, éste si lo ha hecho, probablemente porque aunque conocemos el cuento original, nunca lo hemos leído y, digamos, que hemos llegado con una mente virgen a él.

La historia comienza justo donde lo dejamos con su primera entrega, y a partir de ahí nuestros protagonistas tienen que trabajar duro para conseguir su objetivo y poder romper la maldición que asola a Jalid.

En este segundo libro nos vamos a encontrar con muchas aventuras y muchos momentos emotivos que van a hacer que empaticemos mucho con nuestros personajes, cierto que con algunos más que otros, pero desde luego que comprenderemos muchos sentimientos.

Si os gustan las historias de aventuras, esta bilogía es para vosotros.